Para hablar del impacto atribuible a la apertura comercial de México y particularmente derivado del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), resulta necesario observar el comportamiento de la balanza comercial. Pese a que dentro del proceso de transición de la economía de México con su ingreso al GATT, se observan saldos positivos en la balanza comercial a partir de 1983, resulta evidente una tendencia hacia su reducción, proceso que registra una breve recuperación con la firma del TLCAN.