El presente escrito busca resaltar la funcionalidad de trabajar en la comunidad desde un enfoque transdisciplinar, se subraya así la necesidad de hacerlo bajo una metodología. En este caso se proponen dos metodologías que se pueden implementar: la Investigación Acción Participante (IAP) o la Animación Socio-Cultural (ASC). Con la ejecución de alguna de estas metodologías se propone obtener un diagnóstico situacional que arroje las necesidades y/o problemas que se presentan en la comunidad. Así mismo, se propone intervención con contenidos de Derechos Humanos, abordados desde la unión disciplinar de la Psicología Comunitaria, la Educación Popular y el Arte.